Caso Krushevskiy y Artamonov en Birobidzhan

El jefe adjunto del Departamento de Investigación de la ciudad de Birobidzhan, Teniente Coronel de Justicia Ivan Nenko, dicta una decisión contra personas no identificadas para iniciar un proceso penal por su participación en las actividades de una organización extremista.

La jueza del Tribunal de Distrito de Birobidzhan, Olga Klyuchikova, que anteriormente dictó veredictos de culpabilidad en tres casos de testigos de Jehová, permite el registro de Anatoly Artamonov, de 71 años, y Aleksandr Krushevskiy, de 45. Ambos hombres tienen problemas de audición.

El Comité de Investigación está llevando a cabo registros en los apartamentos de ambos creyentes. Las acciones de investigación de Alexander Krushevsky están dirigidas por I. Y. Nenko, el investigador principal de Anatoly Artamonov D. V. Emelianenko. Más tarde, Krushevsky fue llevado al Comité de Investigación e interrogado. El creyente explica al investigador que se trata de una persona con discapacidad auditiva del grupo III.

El investigador Emelianenko opta por una medida de moderación para los creyentes en forma de un reconocimiento para que no se vayan.

Emelianenko interroga a Artamonov y Krushevsky y los acusa de participar en las actividades de una organización extremista y de estar involucrados en ella.

Anatoliy Artamonov, de 73 años, y Aleksandr Krushevskiy, de 45, están incluidos en la lista de extremistas de Rosfinmonitoring.

El caso pasa al Tribunal de Distrito de Birobidzhan y se remite a la jueza Natalia Shibanova para su consideración.

Comienzan las audiencias judiciales sobre el caso de los creyentes. Se llevan a cabo con la participación de un intérprete de lenguaje de señas, lo que hace posible que Aleksandr Krushevsky, que tiene discapacidad auditiva, participe en el proceso.

Anatoliy Artamonov y Aleksandr Krushevskiy están siendo buscados como parte de un nuevo caso penal contra otro creyente de Birobidzhan, Oleg Postnikov.

Los acusados expresan su actitud ante los cargos. Anatoly Artamonov señala: "Todas mis acciones fueron legales, religiosas y completamente pacíficas. La acusación no alega que yo incité a la violencia o al odio religioso y la enemistad. No hice nada que indicara la continuación de las actividades ilegales de ninguna organización extremista... Nunca he participado en ninguna actividad extremista, nunca he persuadido o involucrado a otros, y nunca he participado en las actividades de una organización extremista".

Aleksandr Krushevsky se hace eco: "Mis puntos de vista y creencias son directamente opuestos a lo que la ley reconoce como 'extremismo'. Mi fe se basa en la Biblia, que es un libro religioso sagrado para los cristianos de todas las denominaciones y que, en virtud de una prohibición explícita, no puede considerarse material extremista (artículo 3.1 de la Ley Federal de Lucha contra las Actividades Extremistas)".